El jeque Ashim Hussein de 41 años y padre de nueve creció como un musulmán devoto. Celoso por las enseñanzas islámicas buscó destruir el cristianismo, y una vez movilizó a sus estudiantes para quemar una iglesia. Pero cuando los miembros de la iglesia se reunieron frente a su iglesia quemada y oraron en voz alta por el perdón de los reponsables, su testimonio desconcertó al jeque Ashim y sacudió sus cimientos espirituales. «Estas personas no son personas sanas —pensó—. ¿Cómo pueden orar por que Dios perdone a alguien que quemó su iglesia? En mi religión, maldecimos a las personas que hacen cosas malas».

Con el tiempo, el jeque Ashim confió en Cristo para su salvación y dejó el islam. Pero cuando la comunidad musulmana del jeque Ashim se enteró de su nueva fe, lo rechazaron, lo expulsaron de su casa y lo amenazaron con matarlo. Durante la última década, ha tenido que reubicarse varias veces debido al acoso y las amenazas en curso. A pesar de esto, el jeque Ashim testifica audazmente acerca de Cristo, y ha guiado a otros 29 jeques a la salvación en Él. «No obtengo paz si no testifico de Jesús», dijo. Oremos por el jeque Ashim mientras continúa compartiendo el evangelio con los musulmanes. Oremos por que él y su familia tengan todas sus necesidades satisfechas mientras buscan reconstruir sus vidas después de una década de persecución persistente.

Haga clic aquí para conocer más sobre la persecución contra los cristianos en Etiopía y saber cómo orar.

Ex islamista: “No tengo paz si no testifico de Jesús”
Categorías: Oración