Aunque los funcionarios de la prisión han declarado oficialmente que Wang Yi, pastor de la Iglesia Lluvia Temprana, está bien en prisión, una fuente familiarizada con su condición ha dicho lo contrario. La fuente dijo que las autoridades penitenciarias mantienen al pastor en una celda altamente restringida. No se le permite recibir visitas ni hablar con otros reclusos, a excepción de dos delincuentes que tienen la responsabilidad de vigilarlo. El pastor Wang come y duerme en la misma celda con estos dos hombres. Los guardias se refieren a ellos como el «grupo de supervisión mutua de tres personas». Al pastor se le da de comer arroz mohoso y se le administran medicamentos vencidos en la prisión cuando requiere atención médica. Los funcionarios de la prisión continúan hostigando a la esposa y al hijo del pastor Wang, quienes viven prácticamente bajo arresto domiciliario con oficiales apostados fuera de su apartamento, así como a los padres ancianos de Wang. Oremos para que el pastor Wang reciba un trato más humano en la prisión y siga siendo una luz para los guardias y otros prisioneros. Oremos por su salud física y mental, por la salud de su familia y por que permanezcan valientes en su fe.

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El pastor de la Iglesia Lluvia Temprana, Wang Yi, sufre malas condiciones en la prisión
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